¿Puede una empresa tener inteligencia emocional?

NOM-035 como trampolín al liderazgo empático La NOM-035 es vista por muchas empresas como un requisito legal, un trámite más que cumplir. Pero en realidad, es mucho más que eso. Si se aplica con intención y comprensión, se convierte en una herramienta clave para fortalecer la inteligencia emocional en las organizaciones. Este blog ofrece un […]
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NOM-035 como trampolín al liderazgo empático
La NOM-035 es vista por muchas empresas como un requisito legal, un trámite más que cumplir. Pero en realidad, es mucho más que eso. Si se aplica con intención y comprensión, se convierte en una herramienta clave para fortalecer la inteligencia emocional en las organizaciones.
Este blog ofrece un enfoque práctico y fácil de aplicar para entender cómo esta norma puede ser el punto de partida hacia un liderazgo empático, cercano y con impacto positivo en el ambiente laboral.
De cumplir por obligación a liderar con conciencia
La NOM-035 busca prevenir factores de riesgo psicosocial en el trabajo. Esto incluye temas como el estrés, la carga excesiva, el liderazgo negativo y la falta de reconocimiento. Todos estos factores tienen algo en común: afectan directamente el estado emocional de las personas.
Aquí es donde entra la inteligencia emocional. Cuando una organización desarrolla esta capacidad, no solo mejora su ambiente, también aumenta la productividad, reduce la rotación y fortalece la colaboración.
¿Qué es la inteligencia emocional en las organizaciones?
No se trata solo de que las personas «sean más sensibles» o «se lleven bien». Se trata de que el entorno de trabajo promueva habilidades como:
- Escucha activa
- Gestión del conflicto
- Autoconocimiento emocional
- Empatía práctica
- Comunicación clara
Estas habilidades no se limitan al nivel individual. Una empresa con inteligencia emocional es aquella que las incorpora en sus políticas, liderazgos y dinámicas diarias.
¿Cómo se conecta esto con la NOM-035?
La norma obliga a las empresas a identificar, analizar y prevenir riesgos psicosociales. Pero más allá del cumplimiento, ofrece una oportunidad de repensar el liderazgo.
Cuando los líderes desarrollan competencias emocionales, no solo reducen riesgos: generan confianza, dan ejemplo y mejoran los resultados.
A continuación, te comparto algunos puntos clave para usar la NOM-035 como base para fortalecer la inteligencia emocional en las organizaciones.
1. Escucha activa: no solo aplicar encuestas
Las herramientas de diagnóstico que propone la norma no deberían usarse solo para llenar formatos. Son una vía para entender lo que vive el equipo.
Recomendación:
- Después de una encuesta, crea espacios donde las personas puedan ampliar sus respuestas, sin miedo a represalias.
- Escuchar de forma activa no es solo oír, es mostrar que se toma acción con base en lo que se comparte.
2. Liderazgo que reconoce, no solo dirige
Uno de los factores de riesgo más comunes es la falta de reconocimiento. Un liderazgo empático entiende que valorar el trabajo no es un lujo, es una necesidad.
Recomendación:
- Capacita a líderes para que den retroalimentación desde la empatía, no solo desde los resultados.
- Fomentar el reconocimiento sincero, frecuente y contextualizado mejora la percepción del ambiente laboral.
3. Comunicación emocionalmente clara
La claridad evita malentendidos, y la empatía reduce el tono agresivo o indiferente en los mensajes laborales.
Recomendación:
- Alinea los mensajes organizacionales con un lenguaje cercano y sin ambigüedades.
- Establece canales seguros para expresar dudas, emociones o desacuerdos.
4. Autocuidado desde la cultura
Una organización con inteligencia emocional no solo promueve el autocuidado, lo facilita.
Recomendación:
- Revisa si tus políticas laborales permiten tiempos de descanso reales.
- Elimina prácticas que premien el exceso de trabajo como señal de compromiso.
5. Capacitación emocional para mandos medios
Muchas veces, el cumplimiento de la NOM-035 se enfoca en los altos mandos. Pero el liderazgo directo es el que más influye en el día a día de los equipos y el desarrollo de su inteligencia emocional
Recomendación:
- Diseña programas de capacitación emocional que ayuden a estos líderes a identificar señales de riesgo, responder de forma empática y regular sus propias emociones.
Y ahora…
La inteligencia emocional en las organizaciones no es solo una tendencia, es una necesidad. La NOM-035 puede ser una vía concreta para avanzar hacia un entorno de trabajo más humano, donde el liderazgo se base en la empatía, no en la autoridad.
Cumplir con la norma es importante, pero aplicarla con visión emocional transforma la cultura de la empresa. Porque una organización con inteligencia emocional no solo previene riesgos, también construye confianza, mejora la colaboración y crea equipos más comprometidos.